De fondo, el mundo ocurre,
establece un código,
se convierte en huella.
Aquí,
avanza la sangre
debido
a la necesidad
de establecer un lenguaje.
Todo un cuerpo aquí,
armonía
en la armonía,
caos
en el caos.
La esencia, a veces,
se pone un disfraz.
Por su necesidad
de hacernos sentir
parte de algo.
De repartirnos.
La ciudad, al fondo,
el cuerpo, aquí.
Transfigurándose.