Esquinas
Están los lunes por la mañana
que huelen a domingos por la tarde.
Los inviernos bisiestos
-con 366 días de lluvia-,
un verano por cada 29 de febrero.
Está el insomnio,
la imposibilidad de dejar de ver,
la obligación de la lucidez,
la falsedad de la lucidez,
la falsedad, a secas.
Está la indigestión de 'noes'
entre los intestinos y el alma,
la ceguera cardíaca,
los tirones de la memoria en la garganta,
el frío de las divisiones con decimales del
'nunca'.
(...Y
está ese
'SÍ',
que le puede a los demás.)